
Cartagena el punto de encuentro para los voluntarios de ESN España durante este verano.
La ciudad portuaria se llenó de energía, maletas, camisetas de colores y diferentes secciones, pero sobre todo muchas ganas de aprender durante la Plataforma Nacional (PN), uno de los eventos más esperados de ESN España. Del 11 al 13 de julio, voluntarios de todas las secciones del país se reunieron en Cartagena, Murcia para compartir experiencias, aprender nuevas herramientas y, por supuesto, seguir fortaleciendo los lazos dentro de esta gran familia llamada ESN.

Durante el fin de semana, los participantes asistieron a un sinfín de formaciones y debates sobre temas tan variados como educación, comunicación, partners, eventos o la organización de eventos. Lejos de ser clases teóricas, las sesiones fueron dinámicas, participativas y, en más de una ocasión, acompañada de alguna carcajada o anécdota.
Cada actividad ofreció la oportunidad de crear nuevas propuestas en todos los temas hablados, descubrir nuevas formas de mejorar los proyectos locales y de participar activamente opinando en los tres niveles: local, regional y nacional.
En las PNs siempre hay espacio para improvisar, reir y poner a prueba las habilidades de trabajo en equipo. Las dinámicas de team building sirvieron para romper el hielo, crear nuevas amistades y demostrar que los voluntarios de ESN siempre saben cómo transformar cualquier reto en un momento divertido.
Además, hubo tiempo para intercambiar experiencias entre secciones, compartir buenas prácticas y descubrir que, aunque cada una tenga su estilo, todas comparten el mismo espíritu Erasmus: pasión, cooperación y una gran dosis de motivación.
La Plataforma Nacional no es solo un evento formativo; es el punto donde se mezclan ideas, experiencias y mucho entusiasmo. En cada edición, los voluntarios vuelven a casa con la mochila más llena: de aprendizajes, sí, pero también de recuerdos, anécdotas y amistades que duran más que un semestre de intercambio.
Para ESN España, esta PN tuvo un papel clave. Sirvió para reforzar la cohesión entre secciones, compartir conocimientos y, sobre todo, recargar pilas para seguir mejorando la experiencia del estudiantado internacional en todo el país. Entre charla y charla, quedaba claro que el futuro de la red está en buenas manos… y con muy buen humor.

La edición de Cartagena fue una mezcla perfecta de aprendizaje y diversión. Entre risas, talleres y alguna que otra confusión con los horarios (porque en toda PN siempre pasa algo), los voluntarios demostraron una vez más el espíritu que define a ESN: compromiso, cooperación y ganas infinitas de mejorar.
El domingo, marcó el cierre de un fin de semana lleno de aprendizaje y compañerismo. Entre abrazos y promesas de reencuentro, todos los voluntarios emprendieron el regreso a sus ciudades con un mismo propósito: llevar todo lo aprendido a sus secciones locales, aplicar las nuevas ideas en sus proyectos y transmitir el conocimiento adquirido para seguir haciendo crecer la red. Porque, al final, eso es lo que hace especial a ESN: que lo que empieza en una PN se multiplica en cada rincón de España.
Voluntarios de ESN España durante la Plataforma Nacional en Cartagena.